Hasta la década de los setenta existía en la Rambla Montevideana unas edificaciones que aparecían en las postales y las fotos tradicionales, estas eran los famosos Ranchos de pescadores artesanales de los cuáles se escribían muchas historias, casi todas fantásticas de los mismos.
La realidad es que no eran más que eso, ranchos de pescadores, donde vivían, tenían las artes de pesca y que oficiaban también de lugar de encuentros después de sus labores (por supuesto regados de buen vino casero). En su cercanía tenían las embarcaciones (sobre tierra después de acabada la jornada) y siempre la rampa de subida y bajada de las mismas, las más de las veces solo a tracción a sangre y algunas pocas con malacates. Por supuesto muy cerca algún muelle o espigón para atracar las mismas, subir las artes de pesca, palangres o redes y bajarla al regreso, casi siempre con una buena cantidad de peces capturados, corvinas en su mayoría. Allí mismo las desescamaban y limpiaban, dejándolas listas para la venta a una clientela que esperaba para comprarlas, no se vendían al peso, era por unidad. Era algo tradicional recorrer la Rambla buscando pescado fresco en algún rancho de los muchos que había a lo largo de la costa de la Ciudad y raro no conseguir, siempre se podía encontrar. Pero llegó piqueta fatal del progreso y alguien decidió que afeaban el lugar y uno a uno los pescadores fueron retirados y reubicados, en su mayoría al oeste de la Ciudad y sus ranchos destruidos. Hoy a Enero del 2021 las fotos de arriba muestran los únicos pilares que quedan, como testigos de esa época. No están considerados ni como valores históricos, ni declarados Patrimoniales, es más, no figuran con ese nombre en Google Maps. Hice una publicación de los mismos, aceptada y espero que se pueda visualizar como lo que son “LOS PILARES DE LOS RANCHOS DE PESCADORES EN LA RAMBLA MONTEVIDEANA”