Visito el Hotel Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel, una auténtica joya del Pirineo aragonés y un brillante ejemplo de rehabilitación arquitectónica. Ubicado en la emblemática Estación Internacional de Canfranc, el edificio ha sido cuidadosamente transformado en un lujoso hotel de cinco estrellas que conserva todo el encanto de su historia ferroviaria. Este edificio lo visité hace 25 años, y puedo asegurar que actualmente es una maravilla.
Su vestíbulo principal es uno de los espacios más impactantes, con una decoración que evoca la elegancia de los antiguos trenes de lujo y las grandes estaciones de principio del siglo XX. Cada detalle está pensado para transportar al visitante a otra época, combinando con maestría el espíritu del pasado con el confort y la sofisticación del presente. Una visita imprescindible tanto para viajeros como para amantes de la arquitectura, la historia y el diseño. El techo me dejó impresionado.
Un truco para visitantes no alojados en el Hotel, se puede visitar la cafetería a las 12:00h , eso si, con aforo limitado!
La antigua Estación Internacional de Canfranc es una de las obras ferroviarias más emblemáticas de España. Inaugurada el 18 de julio de 1928, fue concebida como un ambicioso proyecto para conectar España y Francia a través del túnel de Somport, facilitando el tránsito internacional de pasajeros y mercancías.
La estación destaca por su imponente arquitectura neoclásica, inspirada en la Gare d’Orsay de París. Con una longitud de 241 metros y 75 puertas en cada lado, albergaba una infraestructura completa: aduanas, oficinas gubernamentales, hotel, restaurante, comisarías y más, funcionando como una auténtica ciudad ferroviaria.
La estación contaba con vías de ancho ibérico y ancho internacional, lo que requería el trasbordo de mercancías y pasajeros entre trenes de diferentes anchos.
Durante la Guerra Civil Española, la estación fue controlada por el Ejército franquista, y el túnel que la conectaba con Francia fue tapiado para evitar incursiones. Posteriormente, en la Segunda Guerra Mundial, Canfranc desempeñó un papel estratégico en el transporte de wolframio hacia Alemania y en la entrada de oro procedente de Suiza a España.
El 27 de marzo de 1970, un descarrilamiento en el lado francés provocó el derrumbe del puente de L’Estanguet, lo que llevó al cierre del tráfico internacional. Desde entonces, la estación entró en un periodo de decadencia, aunque continuó operando servicios de Media Distancia en el lado español.
Declarada Bien de Interés Cultural en 2002. Actualmente, se están llevando a cabo estudios para reabrir la conexión ferroviaria internacional a través del túnel de Somport, con el objetivo de restablecer el tráfico de pasajeros y mercancías entre España y Francia. En breve se recuperará el trayecto Jaca - Canfranc, en cuanto me entere haré el viaje. Sin duda. 
