♫ “Que si a Piqué algún día le muestras el Tayrona, después no querrá irse pa’ Barcelona” ♪ ♫
Quiero confirmar la letra de la canción Bicicleta de Shakira y Carlos Vives, si vas al Tayrona no querrás regresar.
La aventura comenzó en Santa Marta, Colombia. Una pequeña ciudad al norte de Colombia a 2 hrs de Barranquilla. Es una ciudad con mucha vida nocturna y turismo, nos sirvió mucho para asesorarnos bien de que llevar al Parque Nacional Natural Tayrona y comprar todo lo necesario para no pasar dificultades ahí (ya que adentro es muy difícil conseguir cosas).
De aquí se toma un camioncito y el cual te va adentrando a la reserva natural del Tayrona, este nos dejó sobre la carretera frente a la entrada El Zaino, como ya teníamos la entrada pagada solo tuvimos que recoger nuestra pulsera (pagar antes vía online se recomienda debido a que hay entrada limitada por día).
Ya recogidas las pulseras tomamos una van la cual nos adentró totalmente a la reserva esto por un camino lleno de vida. La van te deja sobre la entrada peatonal, la cual son aproximadamente 2 km al área de camping y este decidimos hacerlo en caballo. Durante este trayecto puedes ver diferentes especies de animales, como changos y pájaros exóticos.
Nuestro hospedaje fue en el camping Don Pedro y la verdad lo recomiendo, tuvimos una buena experiencia ahí, los precios son muy accesibles y se adapta muy bien al entorno natural.
En el parque estuvimos por cuatro días, en los cuales íbamos con la actitud de caminar, conocer y disfrutar de las maravillas del Tayrona. Porque todos son caminos peatonales en medio de la reserva, que es lo que hace aun mas buena la experiencia.
Cabe destacar que ahí viven tribus y debes respetar sus áreas, al igual que todo el parque. Eso es muy importante, lo cual me dio mucho gusto el ver como cuidan y respetan la RNN.
Los caminos que comento te llevan a las playas principales, la más conocida es la playa Cabo San Juan del Guía, en la cual se toma la foto tradicional del parque (que adjunté al principio).
Fue una experiencia muy emocionante, diferente e inolvidable. Además de que hay personas de diferentes nacionalidades y culturas. Recomiendo mucho hacer esto si vas a Colombia. Además de que es relativamente económico.
Estoy seguro que volveré y me adentraré mas a esta belleza de reserva.